Principios fundantes del Partido del Trabajo de Chile

Principios fundantes del Partido del Trabajo de Chile

El Partido del Trabajo de Chile es producto de la necesidad de avanzar en la construcción de una auténtica Dirección Política Revolucionaria para que nuestro pueblo pueda lograr su plena liberación nacional y social. El   camino para lograr este objetivo no puede ser entendido como una ruta solitaria y sectaria, requiere de procesos de convergencia y unidad de las fuerzas trasformadoras, democráticas y patrióticas y  desde esta definición unitaria surge nuestra organización. Conocemos y valoramos la existencia de otras organizaciones que se plantean tareas democráticas e incluso socialistas, esperamos desarrollar una fraternal debate y relación de trabajo que nos permita avanzar en este arduo sendero común y si es posible confluir en una misma organización.

Sin embargo, la existencia y unidad de las fuerzas democráticas no es suficiente.  La historia del siglo XX en Chile, así como nuestra historia reciente, particularmente la experiencia del proceso de rebelión social de 2019-2020, demuestra la urgencia de levantar una alternativa política revolucionaria que logre constituirse en el factor subjetivo primordial que permita superar la simple representación de demandas y el espontaneísmo social. Este instrumento debe contribuir a levantar condiciones para una ruptura política con el orden socioeconómico capitalista y dependiente existente en nuestro país.

El capitalismo en nuestro país ya ha tocado su límite histórico, su decadencia se expresa en la falta de expectativas, desigualdad creciente, aumento del crimen, la descomposición de la disciplina social, sobrexplotación del trabajo, pérdida de identidad cultural y su reemplazo por la decadente vulgaridad cosmopolita. Sin embargo, el régimen capitalista dependiente de nuestro país solo caerá si lo hacemos caer, no es un acto natural o espontaneo. Este es el objetivo del Partido del Trabajo de Chile y estos son sus principios:

1°.  El Partido del Trabajo de Chile es una organización revolucionaria que se inspira en el Marxismo-Leninismo.  Entendemos al Socialismo Científico como una guía de análisis y acción para la transformación revolucionaria de la realidad social.

2°. La máxima rectora de la construcción orgánica del Partido del Trabajo de Chile es la de constituirse en Organización Política de Nuevo Tipo, es decir una fuerza disciplinada, articulada y sustentada en el Centralismo Democrático, además de los restantes principios y normas leninistas de organización.

3°. El Partido del Trabajo de Chile tiene un carácter patriótico, asumiendo que la lucha por trasformar nuestro país asume el carácter de un combate por la Liberación Nacional. Esta batalla responde a la necesidad de lograr la plena soberanía política, económica y cultural de Chile, subyugado en los últimos ochenta años por la negra y decadente sombra del imperialismo norteamericano y sus aliados.

4°.  A su vez, el Partido del Trabajo de Chile asume el Principio de las dos Contradicciones: La contradicción entre Imperialismo e Liberación Nacional, expuesta en el punto anterior y la contradicción entre Capital y Trabajo, que orienta a nuestra organización a trabajar por la construcción de un Gobierno Soberano, Popular y Socialista para Chile.

Identificamos como enemigo principal en esta etapa histórica al bloque liderado por el Capital Monopólico Financiero, fracción de clase que es una amalgama de los intereses imperialistas y de los grandes grupos económicos locales que domina el conjunto de la economía, la vida política y cultural de nuestra nación.

Rechazamos los intentos de reemplazar estas definiciones históricas de los revolucionarios por la parcelación de las luchas, el sectarismo social, el identitarismo étnico, de genero u otras formas que delimiten las luchas entorno a los criterios idealistas de autopercepción o autodefinición, los cuales han demostrado que son perfectamente aceptables, asimilables y manipulables por el actual régimen capitalista neoliberal chileno. Durante las actuales condiciones sociales son las luchas en torno a las persistentes categorías de clase y nación las que determinarán el triunfo o derrota de la Revolución Chilena.

5°. La construcción del Socialismo en nuestro país es el objetivo del Partido del Trabajo de Chile. Entendemos el Socialismo como una formación socioeconómica en transición entre el capitalismo y el comunismo, esta mantiene formas privadas de producción, a la vez que desarrolla las nuevas formas colectivas. Todo este periodo de transición estará marcado por una aguda lucha de clases, que obliga a los sectores populares a pugnar por mantener una constante hegemonía política, económica, cultural y militar. Esta hegemonía de los trabajadores y sectores populares deberá asumir la forma política de una Dictadura Revolucionaria, que asegure la más amplia participación y democracia para las mayorías nacionales, así como el control y la vigilancia sobre los sectores reaccionarios y otros grupos residuales de la nueva sociedad.

6°. El Partido del Trabajo de Chile, levanta el principio leninista de asumir todas las formas de lucha para la trasformación de nuestra Patria en un estado con alto poder nacional, soberano, justo, ordenado y socialista. Las formas de lucha directa, la movilización social, el combate electoral e incluso el control de espacios institucionales dentro del estado burgués, solo son instrumentos que pueden contribuir en el proceso de modificación de las correlaciones de fuerzas en favor del campo popular. El fetichismo militarista, el horizontalismo social, así como el cretinismo electoral son posiciones unilaterales y antimarxistas que serán combatidas duramente por nuestro Partido.

Consideramos que la actual legislación de partidos políticos es incompatible con las concepciones revolucionarias de nuestra organización. El Partido del Trabajo de Chile no se legalizará en el contexto de esta norma. Entendiendo la necesidad de aplicar el principio de todas las formas de lucha, buscaremos la construcción de un instrumento electoral que permita desarrollar los combates en este terreno sin comprometer, los principios y la estructura leninista de nuestra organización.

7°. El Partido del Trabajo de Chile, es una fuerza política que busca la convergencia con las fuerzas auténticamente democráticas, así como avanzar en un proceso de unidad estratégica con las organizaciones que luchan por la construcción del socialismo en nuestra patria.  En el contexto actual de desarrollo de las fuerzas revolucionarias o transformadoras es absurdo el planteamiento de caminos únicos. Nuestra organización mantendrá una política de unidad en el campo popular, con la idea de construir un amplio movimiento democrático y revolucionario con una autentica vocación de poder.

8°. El Partido del Trabajo de Chile es solidario con los pueblos que luchan por su liberación nacional y social. Nuestros principios patrióticos son absolutamente compatibles con el internacionalismo proletario, que nos hermana a los revolucionarios de todo el planeta.

Esta solidaridad, en forma especial debe ser sostenida con el resto de los iberoamericanos, con los cuales nos encontramos unidos por sólidos lazos históricos y culturales. Rechazamos la constante agresión imperialista a los hermanos de Cuba, Venezuela y Nicaragua, así como a todos los que inician su lucha por la autentica emancipación nacional.

9°. Con un capitalismo en descomposición, que sacrifica valores y principios a favor del mercado, con la vulgaridad, cinismo y el nihilismo individualista como emblema, la ética y la moral se convierten en campo de batalla en que los revolucionarios debemos prevalecer. Quien aspira al capitalismo, aspira a la corrupción y la delincuencia, es el producto social del desprecio al trabajo, el amor al lucro desmedido, al desdén de los lazos sociales y colectivos. El modelo de capitalismo neoliberal ha levantado un altar a la ganancia rápida, destruye cada uno de los valores sociales, incluso los tradicionales que alguna vez le sirvieron para mantener su dominación, todo en función de lo único sagrado para el capital, la obtención de la máxima plusvalía.  El Partido del Trabajo de Chile combatirá estas manifestaciones de la decadencia del régimen capitalista, luchando contra la corrupción y disolución social, partiendo desde sus manifestaciones más brutales como el crimen organizado, el narcotráfico, degradación de las instituciones públicas, hasta la delincuencia cotidiana que afecta a millones de compatriotas. No puede ser de otra forma, quien busca el Socialismo, desea el orden. Una sociedad más justa y humana es una sociedad más ordenada.

El Partido del Trabajo de Chile mediante una efectiva política de control y cuadros velará por la formación moral y ética de la militancia, poniendo como énfasis la lealtad al Partido y al pueblo, el honor a los compromisos adquiridos con la organización y al programa. Lo anterior es imposible sin someter los intereses personales al intereses y objetivos del partido, a la vez de  subordinar  nuestra acción política a las verdaderas  aspiraciones de las masas populares, liberarse del yugo explotador y edificar un nuevo Chile, una nueva Patria común socialista.

¡Gobierno Soberano, Popular y Socialista para Chile!

Partido del Trabajo de Chile